Michael Molinari es el creador de este llamativo, colorido, romántico, ingenioso y carismático juego flash en el que tienes que ayudar a una pareja de enamorados a atrapar 10 corazones alrededor de todo un mundo.
Lo interesante es que lo único que hacemos en el juego es volar, pero no tenemos límites para hacerlo. No existe un tope, ni nada que nos pare... bueno, excepto un gusano gigante que querra comerse a los dos enamorados... pero más allá de eso, podremos viajar libremente por el mar, el cielo e incluso el infinito cosmos.
La música, la estética visual y la jugabilidad son impecables. Una obra de arte con todas la letras. Espero que se animen a probarlo.
Pueden jugar acá.
1 comentario:
El concepto es interesante, pero tiene un defecto fatal. Que apenas se sale el cursor de la pantalla de juego, esta deja de detectarlo, lo cual es incomodo. La solución hubiera sido un modo a pantalla completa.
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